lunes, 16 de noviembre de 2009

Algo nuevo en mi panorama de gustos: Dexter.

Quienes me conocen saben que no suelo variar mucho mi espectro de gustos, y me mantengo fiel a unos cuantos patrones.

En el mundo musical suelo decantarme por el Rock, a poder ser de los '70; en las películas soy más clásico aún, pues a pesar de que la mayoría de mis filmes preferidos están también realizados en la mencionada década, me apasiona el cine en blanco y negro de los '40: Gansters, detectives, gabardinas, pelos engominados, y damas que destilaban clase en cada paso que daban.

En cuanto al tema de series televisivas, era aún más radical, y prácticamente me negaba en rotundo a ponerme a ver algo que no fuese mi admirado House. Sin embargo, hace como año y medio, surgió un personaje en este mundillo que me produjo cierta curiosidad, y tuve que esperar a que pasara un tiempo para poder prestarle la suficiente atención que en ese momento no podía dispensarle.

Se trata, ni más ni menos, que de la serie Dexter, ampliamente conocida por todos -o eso imagino-.

El argumento, para quien no lo conozca, trata sobre un asesino en serie que vive como un honrado ciudadano de Miami, trabajando como médico forense especializado en sangre.

Su vida, de cara al exterior, es de lo más normal: trabajo, casa propia, novia y una hermana -de armas tomar- que trabaja codo con codo con él. Sin embargo ésas son sólo apariencias, pues dentro de Dexter Morgan habita un "lado oscuro" que le obliga, de vez en cuando, a liquidar personas a las que previamente ha elegido minuciosamente, cerciorándose de que hayan cometido algún asesinato por el cual no han sido capturadas.

Su Leit Motiv es el código de Harry, su padre adoptivo, quien se lo enseñó con el único fin de que pudiese sobrevivir y no ser capturado. Primera regla del código de Harry: no dejarse atrapar.

De momento llevo visionadas las tres primeras temporadas, y hoy mismo comenzaré con lo que hasta ahora se ha emitido de la cuarta.

Y me está gustando mucho. Muchísimo diría yo.

10 comentarios:

Maeglin dijo...

Es muy clarificadora de la tendencia ética del susodicho código:
Primera regla del código de Harry: no dejarse atrapar.

Siempre enganchan más los anti-heroes o los Angeles caidos que los pulcros muchachos de alma clara, capa roja y rizo a lo Kal´El.

CISNE dijo...

Parece una doble personalidad...mejor dicho una doble vida....quizas la educacion del padre..pero creo que llevada a unos extremos....tiene que ser curiosa la serie...me voy a interesar por ella...como acabara este personaje??? no me extraña que estes enganchado...
besitos

Petri dijo...

yo ya la he visto y me gusta.
Abrté al mundo que hay mucho por descubri,entre medios mucha mierda, pero si no pruebas tampoco lo descubres.
Un beso

kei dijo...

Estamos igual, esperando la cuarta temporada con ese malo tan carismático John Ligthgow. Lo que sí es que últimamente el factor suerte está dándose mucho para que Dexter se libre.

Carlos dijo...

Maeglin: Ese último tipo de héroes son un poco coñazo. Siempre me fue el tipo oscuro con buenas "intenciones". Por eso, si con un superhéroe me quedo, es con Batman.

CISNE: Pues espero que acabe cargándose a media comisaría. Jajaja.

Blog A: Lo que has comentado me ha traído al recuerdo la letra una canción de FIto: "Ya saldré a dar una vuelta otro día que no llueva". Muchas gracias anyway ;)

Key: El "malo" de la cuarta temporada tiene mejor pinta, incluso, que "El asesino del hielo".

Anónimo dijo...

Ummm, pues a esta aún no me he enganchado y eso que Maeglin me ha hablado muy bien de ella.

Lo que pasa es que soy un poco rebelde con esto de las series: si yo no me engancho por mis propios medios y encima no paro de oir lo bueno que es algo, al final lo dejo aparcado por pereza y no lo cojo hasta que a mí no me da la gana.

Aún así, la tengo apuntada en series pendientes. De momento le estoy dando a Doctor Who que es cosa mala.

Una senderista. dijo...

Me han hablado mucho de esta serie, auqneu no la he visto.
Ahora me ha dado por Eureka

Anónimo dijo...

Muchas gracias por la información, hace un año que no pongo televisión.
Me ha gustado tu blog.
Saludos
anamorgana

Nancy Callahan dijo...

Más vale tarde que nunca.

A mí me ahora me está pasando lo contrario, y es que me da una pereza terrible ponerme con la cuarta temporada. Quizás cuando ya la hayan emitido me la vea del tirón...

Carlos dijo...

Pues te recomiendo encarecidamente que la veas porque, para mí, posiblemente se trate de la mejor temporada.

Absolutamente brillante, te lo aseguro.